Propóleo de abeja: naturalmente saludable

Apis mellifera recolectando propóleo puro 100% en la colmena

¿Qué es el propóleo de abeja?

 

El propóleo se define como una mezcla compleja elaborada por las abejas Apis mellifera a partir de resinas, bálsamos, gomas y otras exudaciones de las plantas que las abejas modifican física y químicamente añadiéndoles cera, polen y enzimas entre otras sustancias.

 

El término propóleo proviene del griego propolis. Pro significa delante o defensa y polis ciudad, lo que quería decir es que era una defensa de la colmena. El propóleo tiene una función física de sujeción y cierre de la colmena y una función química que guarda la salud de la colmena.

 

Los propóleos son muchos y variados dependiendo de la zona de extracción. Pueden ser desde amarillentos, verdes, rojizos hasta muy negros. La composición química del propóleo variará en función del clima, la estación de recolección y la diversidad de plantas de la región, así como de su propia calidad. 

 

En general la composición química de un buen propóleo se compone de un 50% de resinas y bálsamos, 30% cera de abeja, un 10% de aceites esenciales o volátiles, el 5% de polen y otro 5% de materiales diversos.

 

Un 50% de los compuestos del propóleo son fenólicos, a los cuales se les atribuye acción farmacéutica. Los principales fenoles identificados en los propóleos son: flavonoides, ácidos aromáticos y sus estéres, aldehídos aromáticos, cumarinas, triglicéridos fenólicos.

 

Estos compuestos bioactivos del propóleo tienen como misión absorber la radiación en la región ultravioleta del espectro electromagnético y proteger los tejidos vegetales más sensibles de la radiación solar.

 

Las abejas utilizan el propóleo para múltiples usos:

  1. – Cerrar grietas de la colmena e impermeabilizarlas, así como impedir que entren otros individuos.
  2. – Barnizar la colmena incluidos los panales, en general todo el interior de la colmena, puesto que proporciona una protección bactericida y antiséptica
  3. – Como sustancia antiséptica para momificar un cuerpo extraño putrecible y que no pueden expulsar de la colmena.

Propóleo Andaluz “VerdeMiel” en defensa de la trazabilidad y del consumo local de calidad

 

Andalucía tiene unos paisajes y entornos naturales con gran capacidad para producir propóleos aunque casi la totalidad de propóleos que se venden son de importación (Brasil). Nuestras sierras pobladas de encinas, alcornoque y pinos; nuestros valles y bosques de galería de abedules y álamos; además de la gran presencia de plantas de porte arbustivo como son las jaras que dan nombre a “Sierra Morena”, aportan la materia prima vegetal a nuestras abejas para conseguir las resinas necesarias para elaborar propóleo de gran calidad. Es por ello que en VerdeMiel sólo comercializamos propóleo puro producido en Andalucía. 

 

La producción local y con total trazabilidad nos permite obtener productos de gran calidad y fomentar la apicultura tradicional y la conservación de nuestro entorno natural.

Propóleo puro «VerdeMiel»

Calidad del propóleo ¿Cómo saber si es un buen propóleo?

 

  • ♦ Origen del propóleo: la mayoría de propóleos que se comercializan en España son de importación Brasileña. Los apicultores españoles prácticamente no recolectan propóleo por el tipo de manejo de la colmena y el tiempo requerido. Es más sencillo importarlo ya preparado de terceros países con buen precio. Nosotros preferimos promover la apicultura local, basada en nuestros ecosistemas y vegetaciones locales. Produciendo propóleo andaluz de calidad diversificamos las posibilidades de la colmena y conseguimos abarcar un mercado más estable que el de la miel para nuestros apicultores.

 

  • ♦ Si hablamos de tintura de propóleo, una de las primeras cosas que debes mirar es la concentración del preparado. Nuestro propóleo tiene un alto contenido de propóleo puro, nuestra tintura madre tiene un 15% de concentración que ha sido disuelto en alcohol para su mejor asimilación y uso más cómodo.

 

  • ♦ Otra cuestión importante es el método de recolección, como puedes ver en el apartado ¿Cómo se obtiene el propóleo?, el apicultor puede usar dos métodos, el raspado y por rejilla. En VerdeMiel trabajamos con propóleos obtenidos en rejilla, ya que el propóleo es de más calidad, prácticamente no tiene impurezas y otros elementos como en el raspado. Además el cuidado de la colmena se orienta para este propósito con lo que la colmena se centra en la producción de este producto y la localización del colmenar será la óptima para facilitarles el trabajo.

 

  • ♦ Por último podemos hablar de la sustancia en la que está disuelto el propóleo para hacer la tintura madre. El propóleo al ser una sustancia principalmente grasa es insoluble en agua, para su disolución es necesario acetona, amoníaco, benceno, cloroformo, etc. Entre la lista de sustancias se encuentra el alcohol (etanol o alcohol etílico), base de nuestras tintura. Frente las otras opciones que podrían consumirse, el alcohol es la que más disuelve las propiedades del propóleo puro, así aprovechamos todo su potencial y la tintura tendrá más beneficios para tu salud.

¿Cómo se obtiene el propóleo?

Recolección de las abejas

Normalmente son las abejas viejas las que se ocupan de esta labor. El proceso suele ser el siguiente:

La abeja recolectora usa sus antenas para localizar la parte más interesante de la planta, una vez localizada la muerde con sus mandíbulas y retrocede para estirar esta sustancia hasta convertirla en un hilo. Una vez así podrá acumular la sustancia en la canasta de sus patas traseras (tercer par) usando sus otras piernas para formar gradualmente una bola (que generalmente es un poco más pequeña que una bola de polen, ya que el polen es más ligero a igual volumen) que traerá de vuelta a la colmena.

 

Durante este trasiego la abeja segrega enzimas que se unirán a la sustancia obtenida de los árboles y arbustos.

 

Al regresar a la colmena, el recolector descarga su cosecha a otras abejas de la colmena que serán las que se encarguen de aplicarlo en la zona necesaria. Ten en cuenta que las abejas cubren todas las superficies de la colmena con propóleo, es su protector natural .

Recolección del apicultor

Raspado

 

Tradicionalmente el propóleo se ha obtenido raspando las diferentes zonas de la colmena donde las abejas habían depositado mayor cantidad del mismo. Este método es cada vez más desaconsejable, debido a que el propóleo contiene mayores impurezas y posibles contaminantes (resultados de algunos estudios realizados sobre calidad desaconsejan este método de extracción).

 

También es importante tener en cuenta la ubicación del mismo en la colmena: el propóleos de piquera, a pesar de su fácil obtención y acceso, es un propóleos que ha perdido gran parte de sus propiedades, ya que al estar expuesto al medio ambiente, la acción del aire y el sol produce oxidaciones que disminuyen su calidad. También el propóleos de techo suele estar acompañado de mucha cera, mientras el propóleos de piso, contiene demasiadas impurezas.

 

Es conveniente tomar el propóleos depositado en las paredes internas de la colmena o de los laterales y cabezales de los cuadros, ya que poseen mayor concentración de resinas y se encuentra mas protegido.

 

Rejilla o mallas

La recolección debe ser efectuada mediante el empleo de rejillas que optimicen el proceso y garanticen la obtención de un producto exento de impurezas y contaminantes. 

 

La producción con rejillas tiene la ventaja de no producir ninguna modificación en el resto de las producciones de la colmena, invitando a la abeja a propolizar sin alterar el funcionamiento normal de la misma. Las abejas tienden a propolizar todos los agujeros y zonas de paso de mayor tamaño que su abdomen, colocando la rejilla las abejas tiendes a propolizarla y cerrar todos los agujeros. Así contamos con propóleos suficiente para su protección y además un excedente para nuestra producción de mayor calidad.

 

 

Propiedades terapéuticas del propóleo

 

Según han demostrado diferentes estudios científicos a lo largo de los años, el propóleo posee múltiples propiedades medicinales. Es rico en minerales esenciales como el calcio, el potasio, magnesio, hierro y zinc. Entre los principios activos que contiene, destacan el ácido clorogénico, ácido caféico, flavonoides, quercetina, Kaempferol y apigenina. Además, contiene provitamina A, vitaminas del grupo B (especialmente B3), aminoácidos, minerales y bioflavonoides (vitamina P).

 

La actividad antibacteriana es una de las más extendidas como uso terapéutico, debido a la presencia de flavonoides en su composición química. El extracto etanólico de propóleos (EEP) que incluye la resina, inhibe el crecimiento de diferentes bacterias. Además de asegurar un efecto antibacteriano, también proporciona un efecto antiviral en el tratamiento de las enfermedades respiratorias. Ayuda a prevenir y recuperarse de resfriados y afecciones como sinusitis, otitis, laringitis, bronquitis, asma, neumonía, etc. Por otra parte, su uso ginecológico permite actuar contra las llagas uterinas, las cándidas, la picazón y las inflamaciones vaginales. Se usa también para el herpes genital o labial.

 

Los flavonoides presentes en el propóleo son unas de las moléculas naturales antioxidantes más potentes, capaces de unirse a metales como el hierro y el cobre, e impedir de esta forma que se desencadenen las reacciones de oxidación en nuestro organismo. El empleo del propóleo en la regeneración de tejidos es muy eficaz, actuando como cicatrizante en problemas en la piel (abscesos, forúnculos, verrugas, grietas y eczemas). En el aparato digestivo, nos ayudará a regenerar las úlceras y actuará como protector hepático.

 

El uso propóleo es muy extendido para combatir afecciones circulatorias, ya que consigue normalizar la tensión arterial de forma lenta y sostenida. Asimismo, disminuye la fragilidad capilar y ejerce un efecto vasodilatador e hipotensor, a la vez que inhibe la oxidación del colesterol.

 

En relación a sus propiedades odontológicas, estimula la generación de esmalte dental, impide la formación de caries y placa bacteriana, y favorece la curación de las aftas bucales.

 

Tintura ecológica «VerdeMiel» de propóleo 100% andaluz

 

 


 

Nuestro propóleo “VerdeMiel” ha sido elaborado 100% en Andalucía, a partir de propóleo puro, y bajo certificación ecológica. Hemos seguido un proceso de elaboración artesanal, con el propósito de conservar todas sus propiedades naturales. No utilizamos propóleos importados, liofilizados o concentrados de extractos de propóleos. Este producto procede de espacios naturales y libres de pesticidas de Andalucía, realizando una labor que defiende la apicultura local y sostenible.

 

La tintura ecológica «VerdeMiel» tiene una alta concentración de propóleo puro 15% para una mayor eficacia. A partir de sustancias vegetales, nuestras abejas producen un concentrado natural de principios activos entre los que encontramos los fenólicos (flavonoides), aminoácidos, enzimas, vitaminas, terpenos, etc. Dichos elementos le otorgan unas poderosas propiedades terapéuticas con capacidades antioxidantes, antimicrobianas, antiinflamatorias e inmunoestimulantes. El propóleo «VerdeMiel» se convierte en un poderoso complemento alimenticio con un sinfín de beneficios para nuestro organismo.

 

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